KEYUNI
Y KAPODI: Un regalo de Dios
Esta es una pareja Mastanawa de casi 30 años de
casados, tienen cuatro hijas, viven en Sinaí y han sabido sortear las circunstancias
propias de una vida en matrimonio para así mantenerse unidos.
Por mucho tiempo hemos estado orando por Mastanawas
que sean asesores de idioma (que nos
ayuden a adquirir su lengua) constantes,
que nos enseñen su idioma y no se aburran en el intento. También que nos
enseñen su propio idioma y no nos engañen. Principalmente que entiendan de un
compromiso que hay que cumplir. Dios nos respondió y nos envió a esta pareja
que es una bendición.
Cuando preguntábamos por Mastanawas que hablen
bien su idioma nos daban la referencia de Keyuni y lo fuimos a buscar a su
comunidad, pero la primera vez no lo hallamos, fue en la segunda visita a Sinaí
que nos recibió junto con su familia. Desde entonces comenzamos una amistad
entre su familia y nosotros. Esto no quiere decir que ya no tenemos amistad con
otros indígenas, sino que principalmente esta pareja son los que nos ayudan,
aunque también tenemos otros amigos.
Estos días hasta la primera semana de Julio nos
acompañarán en Pucallpa para continuar con nuestro avance en el idioma. Kapodi, primera vez viajó en avión y primera vez
que visita Pucallpa… Ya se imaginarán cómo está ella. Un día les indiqué el
camino que debían tomar para llegar a la casa donde estamos alojados y no
llegaron, ellos tenían que tomar mototaxi, tuve que salir a buscarles y resulta que estaban cerca. ¿Qué pasó?, les pregunté. “en mototaxi no me doy cuenta dónde estoy,
pero caminando si conozco”, respondió Keyuni.
Queremos darles nuestra amistad y amor sin
ofenderles, aunque por nuestra mentalidad de ciudad seguramente ya cometimos
errores que les ofendieron. Es por eso que oramos a Dios para que tengamos sabiduría
en el trato con ellos.
Dios traiga a los pies de Cristo a esta pareja.